El tándem Capitán Contundente – Superneuras

La vida a menudo nos sorprende con extrañas alianzas. Desde Zaragotham (Hispania), nos llegan nuevos y asombrosos relatos sobre Superhéroes enmascarados que luchan contra el horterismo, la cutrez cotidiana y el mal gusto. Y uno de mis preferidos es aquel que nos habla de la curiosa simbiosis que se produce entre el Capitán Contundente y Superneuras (miembros ambos, como ustedes saben, de la misteriosa asociación de Campeones de la Justicia conocida como La Liga Maravilla).

Por separado, no cabe duda de que cada uno de estos enmascarados es muy poderosos, pero es la conjunción de sus habilidades la que los hace invencibles (aunque por supuesto, dicha unión sería impensable, y hasta imposible, de no ser por la invisible pero activa mano mediadora del tercer elemento de LMM, -me refiero, claro está, a El Hombre Inadvertido-).

Es difícil entender que dos Talentosos con orígenes tan dispares puedan llegar a tal grado de compenetración cuando se enfrentan a enemigos comunes. La clave está, sin duda, en las trayectorias vitales de cada uno.

Por una parte tenemos al Capitán Contundente, que creció en la Ultraviolenta Caseattle, rodeado de crimen, bandas callejeras, macarras y brutalidad en general. Y del otro lado está Superneuras, que se hizo mayor en la tranquila y soleada Wescalifornia, enfrentándose –eso sí- a sus demonios internos desde muy tierna edad.

El Capitán Contundente mostró ya en su infancia una inquebrantable moral y una sólida firmeza de principios éticos que lo mantuvieron psicológicamente alejado de la delincuencia, el matonismo y otras formas de maldad que aparecían en su camino. Se puede decir que fue contracorriente, refugiándose en el desarrollo de sus Habilidades Mentales. Pero el que podría haber sido un poderoso Héroe Psíquico de nuestro tiempo, se vio moralmente obligado a convertirse en cabecilla de la fuerza de choque que liberaría a Caseattle de la invasión de los Kripos*. Recordemos que esta decisión implicó la ingesta de un suero experimental SUPERMACARRA que casi lo aniquila, pero que finalmente lo convirtió en el Superhombre que hoy conocemos. El resultado de todo esto es que, pese a adquirir la Habilidad de la CONTUNDENCIA y tener episodios aislados de comportamiento MACARRA, El Capitán conservó gran parte de su sensibilidad pre-suero, aunque ésta quedo alojada en remotas zonas de su subconsciente

Mientras todo esto ocurría, a pocas millas de allí (apenas media hora en aerodeslizador), se hacía mayor Superneuras, cuya ansiedad creciente lo hacía presa de una necesidad insalubre de ingerir alimentos hipercalóricos a gran velocidad (es por eso que su primera identidad fue la de “La Vorágine Humana”). La vida en Wescalifornia transcurría apacible... para CASI todos. Superneuras mantenía rabiosas batallas dentro de su mente, cada vez más consumida por EL BICHO. Es entonces cuando el simbionte alienígena APATICUS se multiplicó y realizó un ataque masivo a la pequeña población. Superneuras entró entonces en un estado de semi-locura, al cual decidió combatir formando un Grupo de Resistencia contra la Mediocridad. No le fue fácil, pero tras algunos intentos fallidos, se topó con “Existencia Negativa”, un Grupo de jóvenes Wescalifornianos con los que compartía sus ganas de derrotar a APATICUS. Durante muchos años, “Existencia Negativa” fue el pilar en tuvo que apoyarse Superneuras para no dejar que EL BICHO y APATICUS acabaran con su salud mental. Más adelante, tras pasar por la Escuela del Profesor Xuanma Almodovier, saldría de “Existencia Negativa” para entrar a formar parte en la “Hermandad del Estruendo Carmesí”, en la que sigue hoy día luchando contra los brotes de APATICUS que todavía pueblan Wescalifornia. Pero esa es otra historia.

Volvamos al punto en que estos dos singulares elementos se conocieron. Dado el carácter rotundo del Capitán, y exceptuando a El Hombre Inadvertido, que ya había compartido 2 años de estudios en la Escuela X, el año en que Superneuras ingresó hubo muchos alumnos que recelaron o se mantuvieron alejados del ex-macarra. Pero Superneuras, gracias a su superpoder de CUESTIONÁRESLO ABSOLUTAMENTE TODO, descubrió enseguida que las apariencias amenazantes del Capitán eran un mero disfraz, y que tras ellas se encontraba un jóven idealista lleno de buenas intenciones.

Así mismo, C.Contundente, embarcado ya en su lucha contra la Mediocridad y el Mal Gusto, y basándose en su INTUICIÓN INFALIBLE, rechazó contundentemente a muchos de los nuevos alumnos, al ver que no estaban hechos de la “pasta” de los auténticos Héroes. Sin embargo, el inestable aunque inquieto Superneuras despertó en él, cuando menos, una cierta curiosidad. Y se fue dando cuenta de que el jóven Neuras compartía su necesidad de erradicar el borreguismo y la estupidez del mundo.

Fue sobre todo a raíz de un ejercicio realizado conjuntamente por la Escuela de Xuanma y la Escuela F-R (Escuela de Ficción-Realidad), en el que Superneuras pidió la colaboración del Capitán Contundente, cuando estos dos Paladines del Bien entendieron como potenciar sus poderes en colaboración. Y así, el Capitán comprobó que sólo su CONTUNDENCIA era capaz de contrarrestar los ataques de DISPERSIÓN MENTAL que EL BICHO le provocaban a Superneruas (“¡Vamos, Neuras, vamos! ¡Nada de depres! ¡Super-Mihura! ¡¡Super-Mihura!!”). De idéntica manera, el Neurótico comprobó como su poder de PUNTUALIZACIÓN CONSTANTE aplicado sobre el Capitán no sólo no obraba efecto (no conseguía que cambiase de opinión), sino que lo empujaba a reforzar sus argumentos con CONTUNDENCIA.

Encontraron también otra forma de colaboración. Por ejemplo el Capitán, amigo y durante años ex-pupilo de ULTRASINCERIDAD, descubrió que podía utilizar sus enseñanzas combinadas con su habilidad de decir VERDADES COMO PUÑOS para incrementar el poder de INDUCCIÓN AL SUICIDIO de Superneuras. De manera que hizo un pacto con él para, en casos de necesidad extrema, machacarlo psicológicamente para deprimirlo de tal forma que fuese capaz de desanimar al más feliz de los Supervillanos. Muchos se preguntan si este poder combinado sería suficiente para vencer a EL GANADOR en un hipotético enfrentamiento...

Pero además, Superneuras es de los pocos mortales que han conseguido traspasar la barrera de CONTUNDENCIA del Capitán y sacar a la luz su lado más humano, encerrado (como ya hemos explicado) en su subconsciente, lo cual lo hace merecedor de la EXALTADA LEALTAD del Capitán. Y fue Superneuras quien aportó la mayoría de las ideas que permitieron construir una versión mejorada del Escudo de la Contradicción Permanente del Capitán.

En próximas entregas, les hablaré del decisivo papel que juega El Hombre Inadvertido en ese triángulo perfecto que ustedes y yo conocemos como La Liga Maravilla. Hasta entonces, y como suele decir el Capitán Contundente: ¡Salud!

Lois Lane (Daily Planet, Metrópolis)

*Banda criminal llena de odio y carente de moral (“El origen del Capitán Contundente” en este mismo blog, y también en la mini-serie “Almighty freaks”, número 3: “Give’em wax!”)